Cristo, la Roca Eterna

En ocasiones, vivimos tiempos en los que experimentamos niveles de dificultad en nuestra vida de tal magnitud, que sentimos que en cualquier momento sucumbiremos a su fuerza, como un barco frente a las feroces embestidas de las olas en alta mar. Es válido sentir temor, pero lo que no podemos permitir es que el miedo nos controle porque, ¿en dónde está cimentada nuestra fe?

En el Evangelio según San Lucas, en el capítulo 6, el padre Leonardo Arboleda nos comparte una enseñanza basada en los versículos 46 al 49 muy propicia para este tiempo de batalla espiritual que como pueblo de Dios estamos librando.

Las batallas espirituales se libran en oración, pero adicional a esto, “las batallas espirituales se libran viviendo como Dios quiere” afirma el sacerdote eudista. Y ¿cómo es vivir como Dios quiere? leyendo y poniendo en acción la Palabra de Dios en nuestras vidas. Cada vez que oremos, citemos y hablemos la Palabra; luego, al salir de nuestro tiempo de oración, hagamos memoria y meditemos constantemente en ella, esto permite que cuando nos enfrentemos a situaciones adversas, podamos resistirlas y vencerlas al declarar las promesas de Dios para nosotros; recordemos que la Biblia no solo es un libro, es un arma poderosa para vencer al maligno y toda obra que busque levantar en nuestras vidas y en nuestro país.

Al vivir la Palabra de Dios, estamos diciéndole ¡No! al pecado, a la violencia, a las injusticias y a la corrupción. “Si alguien escucha y pone en práctica las palabras consignadas en la Biblia, esta persona está fundamentando su vida sobre la Roca; vivirá seguro” nos enseña el padre Arboleda.

La situación actual que como nación estamos viviendo es un llamado a examinarnos, pues la posibilidad de estar encaminándonos en contravía a los mandatos de Dios es alta. Si hay en nosotros alguna mancha que esté ensuciando nuestras vestiduras, volvámonos a Cristo, busquemos Su Perdón y pidamos que nos limpie con su Sangre poderosa. Determinémonos hoy a revisar los cimientos de nuestra vida, a reforzarlos o a fundirlos de nuevo en la Roca de Salvación que es Nuestro Señor Jesús. La invitación que nos extiende el padre Leonardo es a que como Pueblo de Dios nos unamos en este tiempo de batalla espiritual en constante oración y ayuno a fin de reedificar una nueva Colombia sobre la Roca. Esa es la misión de la Emisora Minuto de Dios.

Hagamos un cerco de protección alrededor de Colombia, fundamos los cimientos de una nueva nación, una Colombia que viva bajo los preceptos de Dios y que sea sensible a su voz. La Palabra de Dios en los corazones de los colombianos será el arma que el Señor utilice para librar a Colombia de la destrucción.

“Señor Nuestro, cúbrenos con tu Manto en medio de las batallas de la vida. Tú eres la Roca firme. Hoy clamamos por la libertad absoluta de nuestras familias porque creemos que, si nuestras vidas son libres, Colombia es libre. Depositamos nuestra confianza en Ti pues sabemos que Tú sostienes nuestra vida hasta el final. Tuya es la Gloria. Amén”

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